AUMENTA LA TENSIÓN POR LOS 15 MIL DESPEDIDOS EN EL ESTADO
El secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar, advirtió que podría haber “una nueva medida de fuerza general antes de que termine esta semana” para repudiar los despidos de trabajadores estatales y criticó la militarización de ministerios y organismos públicos.
“Este fin de semana recibimos miles y miles de telegramas de despidos, en todos los casos ilegales y arbitrarios: son más de 11 mil despidos fehacientemente comunicados en todo el país”, sostuvo el dirigente sindical.
En declaraciones radiales, el rionegrino remarcó que las ocupaciones pacíficas en ministerios y organismos públicos se dieron “a pesar de que el Gobierno decidió llenar de policías todas las dependencias públicas” y se quejó de que “para lo único que hay plata es para reprimir”.
“Van por la cabeza de los 70 mil contratados. Por eso, a la tarde en un plenario de más de mil delegados vamos a definir la profundizar el plan de acción y vamos a proponer una nueva medida de fuerza general antes de que termine esta semana”, subrayó.
Durante la mañana, hubo una serie de conflictos tanto en el Instituto Nacional contra la Discriminación, el Racismo y la Xenofobia (INADI) como en la Secretaría de Trabajo.
Luego de forcejear con las fuerzas de seguridad, trabajadores estatales ingresaron al edificio del INADI, mientras que en la Secretaría de Trabajo de la Nación hubo retención de tareas por empleados cesanteados y una protesta llevada adelante por ATE (Asociación de Trabajadores del Estado).
El operativo de seguridad que se montó en las inmediaciones del INADI intentó frenar sin éxito a los trabajadores que ingresaron al organismo, traspasando los molinetes.
El ministro de Infraestructura y Servicios Públicos bonaerense, Gabriel Katopodis, afirmó que la militarización de ministerios y organismos públicos por parte del Gobierno nacional ante las protestas de trabajadores despedidos “es un signo de debilidad”.
“La Policía no está para estar confrontando con los trabajadores que van a cumplir sus tareas: es un signo de debilidad del Gobierno, que no sabe, no tiene capacidad de sentarse en una mesa y dar la cara y explicar por qué tomó esa decisión”, sostuvo el funcionario provincial.