NO ES NOTICIA: GANÓ BERAZATEGUI, ES PUNTERO Y CONTINÚA INVICTO

Alerta naranja decía el pronóstico para la zona sur del Gran Buenos Aires. Aunque esa alerta, no meteorológica, se trasladó a Muñiz, donde Berazategui se tuvo que enfrentar en un campo de juego en pobres condiciones contra un Juventud Unida que quiso sacarle el invicto, a base de pierna fuerte y empuje. No pudo, ya que el puntero sacó del armario el overol para traerse 3 puntos desde el oeste.

Pareciera que a medida que van pasando las fechas, esta fue la 13, los rivales no solo quieren ganar su partido, sino que aspiran a bajar al puntero e invicto, con la friolera suma de 10 victorias y 2 empates en su haber.

Fue tan friccionado el encuentro que solo tuvo algunas pinceladas de Nahuel Pombo, el señor fútbol que tiene el equipo de Troncoso.

El gol llegó en el ocaso del primer tiempo, cuando tras un centro del siempre peligroso Pedro Durante, el eterno Sergio Salomone se tiró de palomita para poner la ventaja del Naranja.

En esa primera parte, en Berazategui amonestaron a Nicolás Pizzarro, que llega a la quinta, y a Roman Martinangeli.

La segunda etapa siguió con el mismo tenor de pierna fuerte, en algunos casos rozando la mala fe por parte del elenco local, empujando los de Muñiz, tratando de manejar la pelota los del sur bonaerense.

Así, al los 10 de esa etapa, Juventud Unida tuvo una situación clara de gol, pero el buen arquero Lescano evitó el empate.

A los 13, luego de un centro del 10 visitante, un nuevo cabezazo de Salomone estuvo cerca de ser el segundo tanto de la visita.

A falta de 9 minutos para el final del encuentro, un gran desborde de Maxi Blanco terminó en un centro a la cabeza de Kevin Gimenez, pero el arquero local evitó nuevamente la caída de su valla.

Ya en tiempo de descuento, se vivieron momentos que hicieron recordar a la vieja y querida Primera C, aquella donde predominaba la brusquedad, los empujones, fouls y enfrentamientos. Tan así fue que el recién ingresado Ian Troilo pegó una patada descalificadora que le valió la roja. Luces de alerta para el cuerpo técnico ya que en dos fechas fueron expulsados dos delanteros.

Ahí no terminó la cosa, ya que en medio de la falta producto de aquella expulsión el arquero local, Agustín Burlón, fue a buscar un milagro, pero encontró la roja del flojo árbitro luego de una agresión sin disputa de la pelota.

Berazategui, ya no es noticia, ganó, es puntero y continúa invicto. Claypole, el próximo rival, es de cuidado, sobre todo porque algunos lo toman como un clásico. Pero para eso falta, ahora es tiempo de disfrutar este triunfo que costó más de lo pensado.

(Fotos: Prensa ADB)