PLATA FÁCIL, FORTUNAS INMEDIATAS: LOS ESQUEMAS PONZI ESTÁN DEJANDO GENTE EN BANCARROTA

La sucesión de denuncias de presuntas estafas con esquemas Ponzi hacen que la sociedad se empiece a preguntar cómo evitar caer en las mismas y en las falsas promesas de recibir fortunas en dinero en forma rápida y sin mayores esfuerzos.

Juan Balerdi, economista de prestigio de nuestro país, hizo un análisis sobre estos temas, además de promover la educación financiera.

“Muchos te dicen no le digas a nadie porque esto es solo para vos, e incluso me ha pasado de ver Ponzi donde dicen no invites a nadie que tenga que ver con fuerzas de seguridad o con el Estado porque lo van a boicotear”, indicó, y agregó: “la gente cae en eso, pero más allá de las responsabilidades individuales por no tener estas precauciones, lo que tenemos que tener en cuenta es que se trata de vivir de algo mágico. Se vende hoy como posibilidad de la salida individual pero a través de la magia de la timba financiera”.

Resaltando que hay una especie de publicidad en la que venden que cada persona se salva sola, Balerdi sentenció: “Cuando la política o lo social está apuntando a que la salida es individual, pero además es mágica porque vas a no tener que trabajar; sólo timbeando plata propia o plata de tus parientes, de tus viejos, de tus tíos y demás: esa salida socialmente vendida va permeando en la gente”.

“Hay una responsabilidad individual pero también hay una responsabilidad social y psicológica, esto trasciende a la economía y trasciende al mercado de valores. Más allá de eso, el mercado de valores autorizará a los jóvenes de más de 13 años a operar en el mercado. No creo que sea una buena idea en el marco de graves problemas con los jóvenes con la ludopatía, por ejemplo”, reflexionó.

Sobre el mismo tema, dijo: “Aunque estén bien asesorados por distintos asesores oficiales y que estén formados, yo no creo que alguien que tiene 13 o 14 años esté preparado para entender los riesgos que implican las distintas inversiones financieras y no pensar que todo lo que ven en las películas o en los reels es la realidad”.

Sobre educación financiera, el economista expresó: “Que esa educación financiera implique la razonabilidad, de cuánto puede representar esa vida financiera en tu vida y no que vas a dejar de trabajar, sobre todo cuando uses plata ajena. Porque en muchos casos los jóvenes administran la plata de los adultos en, por ejemplo, el mundo de las cripto, que obviamente los adultos mayores no tienen ni la más pálida idea, entonces les garantizan rentabilidades que son imposibles de conseguir con seguridad, porque toda rentabilidad implica un riesgo y no necesariamente eso implica un Ponzi. Ahora, en los Ponzi eso además generalmente es delirante”.

LA RENTABILIDAD PROMETIDA EN LAS ESTAFAS

“El nivel de rentabilidad que te prometen que es totalmente seguro, son altísimos y cuando los jóvenes convencen a sus abuelos o a sus padres de que en ese mundo cripto se puede obtener esa rentabilidad, el problema que tenemos es el delirio de cuánto puede o no representar en tu vida la ganancia financiera del mundo cripto o incluso del mundo tradicional. Hay burbujas también en el mundo tradicional. Lo primero que tiene un Ponzi es cuando los que venden esa inversión financiera te dicen “esto no es un Ponzi”. Casi siempre en los Ponzi arrancan las charlas así”.

“Lo segundo que tiene es que no tiene caras responsables e incluso edificios o lugares físicos responsables, por eso el mundo digital, el mundo cripto, el mundo de la web, es un mundo ideal para ese tipo de estafa, porque al no tener lugares físicos como tienen los bancos, es mucho más fácil escapar después a las consecuencias”, consideró, y sumó: “Las consecuencias tarde o temprano llegan, pero para cuando llegan, si está todo en el mundo virtual, los tienen que ir a buscar a Asia o África y ya tienen un par de decenas de millones de dólares y no los van a encontrar tan fácil”.

SAN PEDRO, BAHÍA BLANCA Y BERAZATEGUI SON PEQUEÑAS MUESTRAS

Balerdi explicó que los casos que se están conociendo, si bien son importantes por las pérdidas de dinero individualmente, no es del todo multimillonario como otros casos.

“Esto pasa a pequeña escala, como está pasando en San Pedro, que comparado con otras cosas es pequeña escala, pero para la ciudad de San Pedro es una catástrofe. Pero, puede pasar a gran escala, como unos hermanos que en Sudáfrica armaron una especie de plataforma de exchange y demás, que se llevaron un par de cientos de millones de dólares”, aclaró.

Luego, aseveró: “En todos los casos se mezcla la codicia con la transmisión del mensaje masivo, no sólo de los que venden esto, sino de la sociedad, de que podés vivir de la timba financiera. Lo más fácil de detectarlo en el momento en que alguien te invita, que es el momento clave, digamos, es si alguien te está invitando, desafialo a que te muestre que puede hacer una extracción fácilmente. Es el punto débil que tienen y que nadie pregunta al principio. Hay que preguntarles ´¿cómo voy a salir?´. Todos te dicen que es fácil salir, hay que pedirle que te muestren y van a empezar con las excusas. La extracción es el momento clave que de alguna manera delata a un Ponzi”.